En Madrid, buscando a GOYA

Volverè a visitar el Prado. Es una cita que continuamente y durante años prometía y compartía en conversaciones con los amigos. Aprovechando la exposición de Rafael, por fin, nos perdimos durante unas horas en la grandeza del Museo, Tiziano, Velazquez, El Bosco, y un poco de Goya.

Estas visitas, a las maravillosas exposiciones que hay en Madrid, siempre las complemento, con mi otra afición, buscar sitios cercanos donde poder almorzar. Así pues llegada la hora catorce, paramos y a comentar lo visto. 

Vuelvo a prometer que volveré al Prado, para ver a Goya. 

Lo siguiente, de este periplo, ha sido Paul Gauguin en el Thyssen, y el Reina Sofía. Todavía no había contemplado el Guernica. ¿Imperdonable verdad?.

Recientemente he buscado, donde andaba la obra de Goya. Cuando fui al Prado parte importante de la obra de Don Francisco andaba de viaje. Como buen paleto, nacido en Los Madriles, encontré dos lugares a visitar con obras del gran genio. Uno el Palacio Real, otro el Museo de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando. 

Ayer visite el Palacio Real. La singularidad de esta exposición, es que no sólo se adentra en la vida del Infante don Luis, sino que también reivindica la obra del pintor Luis Paret, esencial para entender la vida del Infante y que, junto con Goya y Luis Meléndez, que también forman parte de la muestra, son considerados los pintores más importantes de la segunda mitad del siglo XVIII español. Bueno creo que el paseo mereció la pena, 17 obras de Goya, una comida en La Taberna del Alabardero, unas raciones en el Gregorio de la calle Bordadores al anochecer y el clásico chocolate con churros en San Gines,  llenaron mis aspiraciones culturales. Próxima estación Bellas Artes.