Rebelión YA
Hoy nos desayunamos con la realidad que tanto nos temíamos, el Gobierno del P.P, no se dedica a gestionar el bien común. No son reformas lo que hacen, estas les importan tres cominos, estas y la economía del País. En las últimas décadas vimos como una generación de trabajadores, de martillo o de cuello blanco, negociaban convenios, subían sus salarios -los suyos y sus compañeros- llevaban a sus hijos a la Universidad, se compraban un coche, un piso, y lo pagaban. Ya sin deudas, muchos de ellos salían de vacaciones, pero estos osados no se conformaban con irse a su pueblo, se cruzaban con caciques y empresarios herederos del antiguo régimen en hoteles y restaurantes. Algunos hasta llegaron a concejales y arreglaron sus pueblos, haciéndolos habitables, cambiando calles de tierra y solares -consecuencia de la especulación- por avenidas y parques. Los empresarios en la joven democracia , gentes de derechas los respetaban, pasando los años esta generación fue desa