Beatriz Talegón

Varios manifestantes abuchean y zarandean a López Aguilar y a Beatriz Talegón en Madrid

En el inicio del 15M, fuimos muchos los antiguos militantes de izquierdas y muchos los ciudadanos que artos de la situación social acudimos a manifestarnos en Neptuno. 
Ya entonces y ahora, creo que lo importante era la manifestación, la suma de miles y miles de personas anónimas que llenaban el Paseo del Prado y nunca las vanguardias auto proclamadas por ellos mismos como tal.
El incidente producido con la participación de Beatriz Talegón, en la manifestación contra los desahucios, pone de manifiesto de nuevo que algunos piensan que el invento es suyo.
Estos grupos, instalados en una supuesta izquierda real, no son nada sin las gentes que acudimos convencidos que algo tiene que cambiar. 
La actitud de estos grupos no son nuevas, en los años 70 ya pasaba, troskistas, anarquistas, maoistas y un largo etcétera, se creían unos grandes revolucionarios tirando cuatro cócteles, en mini manifestaciones. El centralismo democrático, la vanguardia para dirigir al resto de los humanos, era su débil bagaje  ideológico.
Algunas razones de entonces, valen también ahora para desmontar su orgullo "fascistoide". Decía Rosa Luxemburgo, en Huelga de masas partido y sindicatos.
"El movimiento sindical no es aquel que se refleja en la ilusión, comprensible  pero irracional, de una minoría de dirigentes sindicales, sino aquel que vive en la conciencia de miles de proletarios que han sido ya ganados para la lucha de clases. Para esta conciencia el movimiento sindical es parte de la socialdemocracia. “Y aquello que es, debe tener la osadía de aparentarlo."
A todos aquellos, que envalentonados, agresivos, abanderados, acompañados de  tambores, que asisten a las manifestaciones, que son nuestras y de todos. Cuidado. 
Puede ser que Beatriz, haya pagado su "fama televisiva", pero tiene todo el derecho de asistir. Yo desde aquí, animo a los socialistas que lo hagamos, al margen de lo que opina Alfredo, pues no es en la cúpula de las organizaciones donde esta la verdad y la razón de los movientos obreros. En los 70, no había tantos redaños, cuando los trabajadores salimos a la calle, estos imbéciles se disolvieron como un azucarillo. Estos a mí tampoco me representan.